Inspirada en el Cristo crucificado de Velázquez, pone el foco en "la Raíz", en los cimientos como sinónimo de vida y de fortaleza.
De estructura sencilla, desprovistos de color y artificios, se desdibujan unos pies desnudos construidos sobre blanco y negro diluido, que a su vez
comparten protagonismo con un Espacio que, especialmente en esta obra, toma cuerpo y consciencia.
Un ejercicio de reinterpretación de la parte de un todo, desvestido, desestructurado y dotado de un sentido distinto.
1.- Óleo sobre lino, 146 x 114